Alejandro Arriola

No me gusta que me llamen poeta, simplemente soy una persona que escribe.

Luis Alejandro Arriola Ayala, 21 años. Un hombre que ha tenido tantos apodos como cortes de pelo en los últimos 2 años de conocerlo. Es Bachiller en Ciencias y Letras y está en el cuar toaño de Ciencias de la Comunicación, y más chapín que la tortilla; de su propia boca salen las palabras “nací en Guatemala, crecí en Guatemala, actualmente vivo en Guatemala y espero morir en Guatemala”.

Platicando sobre el arte mencionó que tiene dos percepciones en la cabeza. La primera es un poco más teórica aclara,  el arte es la abstracción del pensamiento humano. La segunda viene de completar la frase de un cantante en Twitter, “Te liberas cuando…” y él completó la frase diciendo: “cuando haces arte”. Para él, hacer arte ha sido la única forma de expresar todo lo que lleva por dentro, de sacar lo que nadie conoce.

Actualmente escribe poesía y algunos cuentos cortos. Pero su relación con la literatura se remonta desde años atrás. Inició a escribir en cuarto primaria, su primer poema se tituló “Soledad”. Años más tarde empezó a desarrollar todo lo que venía a su mente. Comparte que la música ha sido gran influencia, pues concibe la melodía y la lírica como inseparable, pero que no escribe canciones, según él, por su falta de ritmo.

El escribir en sí es un aprendizaje personal. La teoría básica que conoce, para escribir poemas, proviene del pénsum de estudios de idioma español y literatura. También cuenta que ha tenido la oportunidad de tener maestros cantantes o escritores, lo cual ha ayudado mucho. Pero admite que se necesita algo más que teoría para hacerlo. Cree que se debe de orientar el talento para lograr desarrollar todas las ideas y pensamientos en palabras concretas.

Él escribe para quien lo inspira. Pero espera que sus poemas lleguen a muchos, pues confiesa ser muy tímido y cree que sus escritos lo pueden ayudar a exponerse ante el mundo. Cuando le pregunté si tenía algún texto publicado contesto “Ya he escrito dos epitafios jajaja, ¿Eso cuenta?”. Luego de un momento de risas comento que ha escrito para varios concursos y publicado sus poemas en su blog. Con respecto al futuro planea seguir escribiendo, pero sobre todo publicar sus dos recopilaciones de poemas.

Escogió estudiar comunicación porque es una de la pocas carreras en las cuales tenía la oportunidad de desarrollar la creatividad y el arte. Además que en comunicación, se escribe todo el tiempo, lo cual le da la oportunidad de intentar cambiar el contenido mediático y hacer la diferencia. Y está seguro de que el arte y la comunicación son complementos perfectos para crear un mundo distinto.

Hablando sobre los variados temas que toca en sus poemas y la periodicidad con la que escribe, logró diagramar el proceso de escritura de sus poemas que a continuación agrego:

Paso 1: vivir una desgracia o situación que te cree sentimientos o pensamientos.

Paso 2: vagar en esos pensamientos e ideas.

Paso 3: agarrar el papel y lápiz que se tenga a la mano o la computadora.

Paso 4: dejar que tus pensamientos fluyan y se conviertan en palabras.

Paso 5: corregir ortografía.

Paso 6: ver coherencia, orden de palabras y signos de puntuación.

Paso 7: darle titulo.

Paso 8: enseñarlo.

Antes de pasar a sus poemas, les dejo un dato. No tiene un poema favorito, pero dice “me pone a pensar mucho el cuento: El dinosaurio de Augusto Monterroso”.

La Cuarta Imagen De La Alacena

La cuarta imagen de la alacena se encuentra al lado de la pimienta, frente a las viejas habichuelas, un poco sucia de turrón; descansa libremente en el espacio, en compañía de otras imágenes que son solo el recuerdo de un recuerdo

El olor a madera vieja hace una tranza discreta con el aroma a fruta seca y anilina; el vacío juega con las cortinas que permanecen en el corredor, esperando a que la lluvia pinte un picazo sobre su delicada piel…

La cuarta imagen de la alacena descansa sobre la primera y la segunda; han sido golpeadas por el tiempo, dejándolas con la sonrisa amarillenta y algunos rastros de polillas

El olor a madera vieja se escapa por los ventanales, acariciando suavemente las esquinas que rodean la porcelana; hace que la ambigüedad parezca ingenua y que el contorno de las sombras difiera a contra luz…

[…Bang…]

La cuarta imagen de la alacena ha dejado claro la existencia de una tercera: la olvidada, solitaria e inexistente tercera imagen de la alacena; perdida alguna vez junto a la miel y la harina o aun guardada debajo del café

El olor a madera vieja dibuja espirales frente al cuerpo inerte que dejo su inocencia y su respiro; el algodón de azúcar se encuentra sobre las especias y las flores de satín: la cuarta imagen de la alacena espera en silencio la llegada de una más, vestida de ademanes rojos…

Para leer más sobre este artista visita su página: http://luicalexo.wordpress.com/